Cuba, la isla más grande enclavada en el mar Caribe, guarda una historia fascinante; desde la conquista y colonización española en el siglo XV hasta la ocupación estadounidense y luego la independencia. Quedó atrapada en medio de la guerra fría bajo el liderazgo del comunista Fidel Castro, y es responsable de una serie de logros humanitarios. Geográficamente ubicada en una encrucijada, muchas personas han encontrado su camino hacia Cuba, y la isla ciertamente se ha labrado un nombre en la historia. Su singularidad se expresa a menudo a través de la música y la danza.
Con influencias que abarcan desde África Occidental hasta Europa y, por supuesto, notablemente España, los géneros musicales cubanos a menudo se consideran una de las músicas regionales más ricas e influyentes del mundo.
La música con frecuencia cuenta una historia, y Cuba refleja las vivencias y la cultura de su gente. Es hogar de personas de diferentes orígenes étnicos, religiosos y nacionales. Para los cubanos generalmente la etnia no equivale a la nacionalidad sino a la ciudadanía y su lealtad a Cuba. Este crisol de nación ha resultado en una fusión fantástica de estilos musicales y composición.
“Por ejemplo, el son cubano fusiona una guitarra española adaptada (tres), melodía, armonía y tradiciones líricas con percusión y ritmos afrocubanos”.
Desde el siglo XIX, la música cubana ha sido enormemente popular e influyente en todo el mundo. Desde la introducción de la tecnología de grabación, la música cubana ha contribuido al desarrollo de una amplia variedad de géneros y estilos musicales en todo el mundo, sobre todo en América Latina, el Caribe, África Occidental y Europa. Los ejemplos incluyen rumba, jazz afrocubano, salsa, soukous, muchas re-adaptaciones de la música afrocubana (Orchestra Baobab, Africando), fusión de géneros de la música española (particularmente el flamenco) y una amplia variedad de géneros en América Latina.
Veamos algunos de ellos
MÚSICA CAMPESINA, quizás algunos de los estilos musicales populares más antiguos de Cuba incluye punto guajiro, zapateo, criolla.
Una variedad de estilos musicales en Cuba se puede agrupar por su PATRIMONIO AFRICANO. Clave, carnaval cubano, Tumba Francesa, todos invocan su herencia africana, a menudo combinando rituales religiosos con canciones y bailes.
La Tumba francesa combina tradiciones musicales de los orígenes africano occidental, bantú, francés y español. Los etnomusicólogos cubanos coinciden en que la palabra “tumba” deriva de las palabras bantú y mandinka para nombrar tambor. En Cuba, la palabra tumba se usa para denominar a los tambores, los conjuntos y a la actuación en sí misma en tumba francesa.
Las tumbas francesas están dirigidas por una maestra de ceremonias llamada mayora de plaza. Las actuaciones generalmente comienzan con un canto en solitario improvisado en una mezcla de patois español y francés denominado kreyol cubano o patuá cubano por el vocalista principal. A continuación, se toca el catá (un idiófono cilíndrico de madera golpeado con dos palos) y el cantante principal alterna el canto de llamada y respuesta con un coro de voces femeninas (tumberas). Luego de que el catá establece el ritmo, se tocan las tres tumbas.
Originada en Europa, la CONTRADANZA, donde fue conocida como la “danza de campo” a fines del siglo XVIII, fue adaptada en Cuba. Mezclando estilos musicales africanos y europeos, “esta criollización es un ejemplo temprano de la influencia de las tradiciones africanas en el Caribe. La mayoría de los músicos eran negros o mulatos (incluso a principios del siglo XIX hubo muchos esclavos liberados y mestizos viviendo en los pueblos cubanos) ”.
La HABANERA se desarrolló a partir de la contradanza a inicios del siglo XIX; distinguiéndose por el hecho de que se cantaba, se tocaba y se bailaba. Escrita en 2/4 compás, la Habanera se caracteriza por un desarrollo melodioso expresivo y lánguido y por su característico ritmo llamado “Ritmo Habanera”. Versiones de composiciones del tipo habanera han aparecido en la música de Ravel, Bizet, Saint-Saëns, Debussy, Fauré, Albeniz. El ritmo es similar al del tango, y algunos incluso creen que la habanera es el padre musical del tango.
La GUARACHA emplea un tempo rápido y letras cómicas o picarescas, y se canta con mayor frecuencia en los burdeles. El género se convirtió en una parte integral del teatro cómico bufo a mediados del siglo XIX. La guaracha actualmente sobrevive en los repertorios de algunos músicos trovadores, conjuntos y grandes bandas al estilo cubano.
La RUMBA es un género secular de música cubana que incluye la danza, la percusión y el canto. Se originó en las regiones del norte de Cuba, principalmente en las zonas urbanas de La Habana y Matanzas a finales del siglo XIX. Este género musical se basa en las tradiciones de danza y música africanas, conocidas como Abakuá y yuka, así como en los coros de clave de origen español.
El origen del SON cubano se remonta a las rumbas rurales. Ganó popularidad mundial durante la década de 1930. El Son combina la estructura y los rasgos de la canción española con elementos estilísticos y de percusión afro cubanos, al igual que gran parte de la música de Cuba. Sin embargo, el son cubano es una de las formas musicales latinoamericanas más influyentes y extendidas en la actualidad: sus derivados y fusiones, especialmente la salsa, se han extendido por todo el mundo. Sus instrumentos musicales más característicos son el Tres, y el conocido bongó de dos cabezas. También son típicas las claves, la guitarra española, el contrabajo (en sustitución de la originaria botija o marímbula), la corneta o trompeta y finalmente el piano. Esta fusión de instrumentos es típica de dicho género musical.
Después de la guerra hispanoamericana, surgió una variedad de géneros musicales a medida que músicos de Cuba viajaban a América y regresaban. El JAZZ AFROCUBANO, el MAMBO,el CHA CHA CHÁ, todos se hicieron populares.
La música cubana llegó a los Estados Unidos después de la Segunda Guerra Mundial, con Mario Bauza y la orquesta Machito en el lado cubano y Dizzy Gillespie en el lado estadounidense como los principales motivadores. Chano Pozo, un percusionista de jazz cubano, también fue importante, ya que introdujo los ritmos básicos cubanos a músicos de jazz como Dizzy. El mambo entró por primera vez a los Estados Unidos alrededor de 1950 y lo tomó por asalto, sin embargo, ya se había estado desarrollando en Cuba y la Ciudad de México durante algún tiempo. El jazz cubano ha seguido teniendo una influencia significativa.
La música cubana ha seguido diversificándose durante los años 50, los revolucionarios años 60 y 70; y los cubanos han estado cantando y bailando una variedad de géneros como el FILIN y la NUEVA TROVA. La salsa con influencia cubana surgió en Nueva York y recientemente la TIMBA, que se diferencia de sus contrapartes de salsa en que enfatiza en el bombo, que no se usa en las bandas de salsa. Últimamente el CUBATÓN, que evolucionó del dancehall y ha sido influenciado por el hip hop estadounidense, la música latinoamericana y caribeña, ha cobrado presencia con la generación más joven. Las voces incluyen rapeo y canto, particularmente en español.